\"Escribiendo sobre ti, un día se enamoró/ y se equivocó tanto en el amor,/ que el libro se canceló/ y despidieron al escritor\".
El día en que ya no sepa sobre qué escribir
escribiré tu nombre y sólo eso me bastará,
cuando ya no recuerde cómo sobrevivir,
algo de mi alma a la tuya se aferrará.
Y me parecerá noche lo que aún es día
y día me parecerá lo que sólo noche es.
Nadando contra corriente te amaré todavía
y tú me amarás también quizá... tal vez.
Cuando no sepa qué escribir preguntando estaré
por qué mi inspiración de pronto se me esconde,
creo que si la busco seguramente la encontraré
y si es a tu lado, será fácil imaginar en dónde.
Y de nuevo sobrevivir se me hará muy sencillo,
tan sólo con mencionarte y muy cerca sentirte.
Tendrá todo en mi mundo tu mágico brillo
y raudo saldrá algún “te amo” que quiera decirte.
Cuando ya no sepa qué escribir yo escribiré,
no importa, letras alocadas, sin ningún sentido,
total, poemas mucho más locos te enseñé
y me parece que todos los has entendido.
Sabes que son para ti, los sientes y me crees,
no tratas de entender mis tormentas personales,
yo soy mucho de esto que escribo, de esto que lees,
a veces con alegrías ficticias... y tristezas reales.
Cuando no sepa qué escribir no me rendiré,
lo que siento no me da razones para rendirme,
yo mismo me haré una cita en tu alma y ahí estaré,
a ver qué llego a decirte y qué llegas a decirme.
Ahí los dos, frente a frente, ante la nostalgia viva,
cuando sin escribir creas que vas a encontrarme,
algo dentro de mí me pedirá a gritos que escriba
y al verme en tus ojos, ya no podré negarme.
Y aunque no sepa qué escribir algo me saldrá,
aunque sea algo muy loco o escrito al revés,
mi inspiración con tu nombre a mí volverá
y tú me amarás como siempre quizá... tal vez.