Guardo de tus besos el aroma,
cual roció posado en tiernas rosas/
así es la miel de tus labios, que
por primera vez/ probé de tu dulce boca.
Fue disfrutar un manjar de dioses,
cuando en una mirada se fundieron/
nuestras almas; en un cálido “te quiero”
que presente sigue, en mis adentros.
Recuerdo ese mágico momento,
cuando nuestros suspiros/ se unieron
en un solo aliento, al compas de un bolero/
que despacio recorre nuestros cuerpos.
Marcando los pasos, el tic-tac
del tiempo/ que lentamente nos hundía,
en un mar de amor eterno/ perdidos;
naufragando en un titanic de sueños.
Te miraba fijamente y tus ojos
reflejaban; la plateada luna llena/
que amorosa sonreía, mientras mis labios
respiraban… el aroma de tus besos.