Roca de sueños
Sentado estuve, sobre esta
roca de sueños, ahí permanecí
diez mil lunas.
El barco con sus redes buscando
peces de colores, el viento un
poco fuerte rompían los hilos de
madera tallada en un te quiero,
¡crecían los ríos!
¡Bajaban las noches a tomar gotas
de rocíos en la taza de un
corazón perdido!
¡Los lagares de tus labios
entristecidos gritaban en la
ausencia de tus besos
desaparecidos…!
El sur traía aquella palabra,
que cayo del arpa sin cuerda,
entretejiendo sueños y esperanzas,
¡calle por un momento!
Cuando la niebla cegó mi
entendimiento,
¡calle por un momento!
Cuando caían las lluvias de
sangre sobre mi pecho,
¡el sabor amargo!
¡La canción desesperada!
El duelo de mano a mano,
sin decirte un te amo…
Sentado estuve, sobre esta
roca de sueños, las flores
conocían mi tormento,
el sol mi calor.
¡Mientras las hormigas llevaban
en partes mi corazón!
La roca de sueños permanecía,
¡mi cuerpo se iba!
Lentamente caía a la fosa de
Sombras tenebrosas,
¡mis esperanzas veían que tu
sonrisa cubrían las diez mil
luna!
En un instante dejó de ser un
sueño, porque en el sueño
estaba yo.
Autor: José Monnin elpoeta
Limpio-Paraguay
del libro: Tu poema entre las sombras.