Junto al alba
desperte
dejando la noche
fugitiva,
alborada risueña
iluminaria del alma
amorosa receptiva.
Tímida brisa
cómplice de nubes
me robaron
la prisa.
Caminos frondosos
flores saludables
cantos hermosos
aromas perdurables
en este
mi recorrido
a descubrir
tu mundo escondido.
Cuando ya casi
la penumbra llega
al ocaso perdido
mi cuerpo se entrega.
Junto a la noche
encontrarte,
de nuevo decirte
he venido
a amarte.