Pequeña, en una gota de tanto dolor,
siento tuyo un mar de tempestad vivo,
olas crecen, pero bailan por el amor
y enseñan que con fuerza sos camino.
Mujer, en los pasos del tiempo, sabor
de lo que has pasado, marca habido
pero más marcará lo que tenga valor
cuando, aun sin saber, te sea crecido.
Niña, hay una que vive de darle amor,
un día que naciera y su madre te hizo,
ella es el calor en tus nubes del temor,
incluso si, falsamente, parece perdido.
Pequeña mujer niña, tienes del amor
ese toque con tus letras que es divino,
nunca dejes que de lágrimas, el furor,
arranque la paz, por lo que eres, vino.