Curvilíneos sedosos
vapuleando sentidos
parpadeando mecidos
en quehaceres verdosos;
serpenteando oficiosos
zigzagueante paisaje,
zarandea el oleaje
con bramido vehemente,
balbuceando estridente
prohibitivo lenguaje.
Febril vaivén insinuante
liada visión humedece
en corriente alza y decrece
dúctil verdor fascinante.
Delirio reconfortante
gentil aroma cultiva,
suave mirada cautiva
es desbordada imperiosa
por sensación misteriosa
en su esencia fugitiva.
Balanceos voluptuosos
seducidos en encantos
arrullando en tiernos cantos
que se entonan impetuosos;
son los crujires plumosos
reptando sobre la arena
que en la corriente serena
gatean sobre a la playa;
atrás quedó el atalaya
que al origen concatena.
Alzada cresta lechosa
empinada la gradiente
agita sutil torrente
en su frescura espumosa;
que en caída bulliciosa
comparte su intimidad,
renunciando en libertad
con su andar interminable,
con blanca sonrisa afable
yace sin temeridad.
Aturdidos los sentidos
agitando conmoción
ingrávida sensación
manifiesta en estallidos.
En ojos humedecidos
la agitación rebalsada,
drena lágrima salada
la mirada agradecida,
cual esencia innata y fluida
a la inmensidad donada.
Oscilante en emociones
el mar del entendimiento
con vibrante movimiento
ondula mil sensaciones;
contonea direcciones
pulsando una eternidad
diluida realidad
de saber incomprendido,
fósil tesoro escondido
alberga en profundidad.