EL ÁRABE Y EL CATALÁN
Un día caluroso de verano
bajo los rayos de un sol soberano
en medio del hostil desierto afgano
un árabe se arrastraba de sed con desgano.
Y una figura divisó a lo lejos
entonces sin dar más cordelejos
y esperando hallar agua, fue al lugar
por el calor, rápido se quería acalugar.
Sediento, con un sol que brilla
vio a un catalán bajo una sombrilla
junto a un gran tenderete con corbatas
también unas chilabas que parecían batas.
El árabe se moría por embeber
y le pregunta si tiene agua para beber
“Agua no tengo, pero te vendo una corbata”
el árabe que se molesta y luego se le arrebata.
“Nada de corbatas, no moleste
estoy muy sediento, sólo quiero agua”
el catalán le dice: “ Camine hacia el este
a 3 horas hay un restaurante, ahí tienen agua”.
Se fue y el tiempo pasa y progresa
y después de 4 horas el árabe regresa
adonde el catalán que lo mira pasmado
y le dice:"Bienvenido otra vez mi estimado".
¿Qué pasó, quiere que le de una mano?
"Nada, he vuelto a comprarte una corbata,
lo que pasa es que el maldito de tu hermano
no me deja entrar, si no me pongo una corbata".
EL MANU