Roberto Reyes Cortés.
5º.reyes
rreyescortés@hotmail.
----------LA FOTOGRAFIA.-------
Hallé una fotografía entre cosas
que empolvadas se hacinaban
en el último rincón
apartado de la casa.
Dentro de mí se revolvió
un confuso
entrechoque de emociones.
Es tu efigie,
retratada al pie de una ventana
entre nubes lejanas y barrotes
carcomidos por el tiempo.
La miro y siento
el rítmico andar de los segundos
de mi acelerado corazón,
donde vuelcan exaltadas
y pasadas ilusiones.
Asoman por ahí,
rotas unas piedras
en el marco del horizonte
que se aleja.
Son los caminos añorados
que nos muestran
que por ahí tu y yo,
hemos transitado
Hondas huellas del tiempo
resaltan en mi cara,
otras profundas también
han quedado marcadas
en tu espalda.
El sol las hace lucir oscuras,
como cadenas que rotas quedaron
para siempre,
aunque estuvimos,
abrazándonos con ellas.
La sombra de los arboles,
el llanto del viento;
una nueva brizna de yerba
desprendida de la montaña
a donde nunca penetramos,
gimieron en tu boca
cuando estalló
mi encendido sentimiento.
Diluvió el cielo con estrellas
y al caer la tibia noche,
nos miraron sonreír
y nos invitaron
a viajar con ellas.
Cerramos los espacios
entre tu cuerpo y el mío,
y deambulamos
lentos, calmados,
porque ya no existe aliento.
Lo agotamos en el ardiente
azul del universo.
Solo vamos a llegar
hasta el recodo
donde tu rio se entrega
a la playa enamorado
y ahí
aguardaremos
la alborada.
Para que vuelva de nuevo
tu imagen tan querida a mi regazo,
esperaré otra vez,
y contigo ahíta de alegría,
tomaré la paz que para siempre
tus ojos oscuros me han marcado,
porque ahora solo tengo
el quemado color de aquel
retrato.
--------------------------------------------------------