Tierna la Luna nos vela,
y eres tú, no su mirada,
quien mi sueño desvela
abrazados en la cama.
Que no sea mentira,
rezo todas las noches
mientras tu piel respira
felicidad sin reproches.
Que no sea mentira
el cálido manto
que el frío retira
con tus encantos.
Que no sea mentira
el paraíso salvador
de la muerte y de la vida
que es nuestro amor.
Tierna la Luna nos vela,
y eres tú, no su mirada,
quien mi sueño desvela
abrazados en la cama.