Hugo Emilio Ocanto

Te alejaste ( Parte dos) Guión teatral

Nos dirigimos los cuatro

hacia mi coche. Subimos.

Y comencé a conducir hasta casa.

En el trayecto del viaje,

sonriendo dije:\"Pequeña, hemos hablado

bastante, pero no nos hemos presentado,

¿cuál es tu nombre? Alejandra...

hermoso nombre... el mío es Emilio,

mi mamá se llama Rosa, la cual

es tan hermosa como ella,

y mi papá es Severo, que muchas veces

le hace honor a su nombre...\"

Nos sonreímos los cuatro,

y yo interiormente me noté

un poco nervioso.

No sabría precisar por qué.

Mirabas con ojos asombrados

todo el paisaje durante el trayecto.

Decías que todo era hermoso.

Papá tuvo la intención de encender

un cigarrillo, y mamá no se lo permitió.

Papá comentó: \"Estas mujeres,

no te permiten hacer lo que uno quiere,

tenemos que hacer lo que ellas quieren\"

Le contesté que mamá tenía razón.

Que no le hacía bien fumar,

y menos dentro del coche.

Ni yo se lo hubiese permitido.

Al fin llegamos a casa.

Bajamos y mamá le indicó

a Alejandra su habitación.

Era reducida, pero para

una persona, cómoda.

Mamá te ofreció si querías bañarte,

y aceptaste de buena gana.

Después, entre tú y mi madre,

comenzaron a preparar la cena.

Yo ya había adelantado las compras.

No faltaba nada para una buena velada.

Teníamos una invitada especial,

aparte de ser una huésped en la casa.

Alejandra comentó parte de

su vida en el Chaco,

inclusive los comentarios de su padrastro.

Después dijo que no quería recordar aquello...

Terminamos de cenar.

Cada uno se retiró a su habitación,

Y yo me fui a bañar...

Por primera vez resbalé en el piso

y casi me caigo.

Por suerte evité la caída

sosteniéndome en la pileta.

Seguía notándome extraño, nervioso.

Salí del baño ya en pijama,

y entré en mi habitación.

Me acosté, y no podía conciliar el sueño.

Mis padres tenían su habitación

en la planta alta.

Alejandra y yo en la baja.

Tenía necesidad de fumar,

pero hacía tiempo que no  lo hacía,

y me abstuve de hacerlo.

Cosa extraña... tener deseos de fumar...

Interiormente sentí que también

otro deseo tenía... pero borré mi pensamiento,

y me dispuse a dormir...Lo había logrado. No se cuánto

tiempo había pasado,

y escuché gritos de Alejandra:

 

\"No, salga, déjeme... déjeme en paz!...\"

Mamá y yo de inmediato estábamos en la puerta

de su habitación. Mamá golpeó y entró.

Yo me quedé afuera.

Cuando mamá salió, comentó

solamente: \"Tuvo un mal sueño,

vayamos a dormir, hijo.

Ella está bien\"

Fuimos a nuestras respectivas habitaciones,

y descansamos hasta la mañana siguiente.

Yo no dormí muy b ien... de cuando en cuando

me despertaba, dándome la sensación

de que escuchaba gritar a Alejandra,

las palabras que había escuchado...

\"No, salga, déjeme... déjeme en paz!...\"

Al día siguiente amanecí con un

fuerte dolor de cabeza...

Extraño... me dio la impresión

de haber tomado mucho alcohol,

cuando en realidad no fue así...

No estaba acostumbrado hacerlo...

Entré en el baño. Después fui a la cocina

para desayunar. Papá no estaba.

Solo  mamá y Alejandra.

Nos dimos nuestros buenos días,

y comenzamos a desayunar.

Especialmente a Alejandra le pregunté

cómo había amanecido, y me contestó

que muy bien.

Mamá tenía una mirada muy triste.

A pesar de ello, sonreía y hablaba

bastante, don dinamismo, como

era su costumbre.

Sentada frente mío Alejandra

de vez en cuando me miraba en una forma

muy dulce y triste a la vez.

Me cambié para disponerme

a salir a trabajar. Vendo productos quirúrgicos.

Antes de salir, papá ya se había levantado,

y estaba desayunando. Dijo que se había levantado

con dolor de cabeza, y que había dormido poco.

¡Qué coincidencia, igual que yo!

que ahora estaba bien.

\"Un dolor pasajero\", comentó.

Antes de irme, les di un beso a mis padres...

Alejandra nos miraba dulcemente.

\"Permiso, permíteme saludarte

a ti igual que a mis padres,

con un beso de despedida.\"

Le tomé una mejilla, y la besé.    CONTINUARÁ


 

 

 

 Todos los derechos reservados del autor - Hugo emilio Ocanto- 13/12/2012)