Cuando de mi mejilla la briza arranque para siempre un día
De un zarpazo el ultimo girón del sublime beso de tu boca,
Enredado ilusamente a los recuerdos de tus labios caminare
Como barca sin rumbo a la deriva hundido en loca melancolía.
Resquebrajada ya mi vida vana el corazón dejara de amarte,
Como hoja deshilada y seca se unirá el alma solloza al viento,
Te borraras de mis pupilas y se quedara el llanto en las manos,
Mi sonrisa dormirá ya yerta abrazada al olvido tras la puerta.
Cuando ahogado en lágrimas de mi memoria tu beso muera,
Como esquirlas al infinito volaran tu nombre y sus letras,
El rizo de tu blonda cabellera huira como espuma de mar,
Y yo, ya vacio en soledad con mi último suspiro moriré.