Después que la semilla cae a tierra
nace con su fuerza y valor,
con tal extrañeza en un botón;
del que se espera una rosa,
luz y vida en su pequeñez
dulzura y amor su reflejo.
Mas tiempo destructible se acerco
y ella sola se encontraba,
feroces viento la atraparon
y la luz de su belleza se entumecía.
Pequeño botón que quisiste ser rosa
tu hermosura se congeló y se esfumó
jamas podras florecer
quizás porque nunca se escribió,
ese destino nunca te perteneció;
en algún tiempo tuviste gloria
pero hoy todo aquello desapareció.
Poco a poco moriste
en el mismo lecho en que naciste;
fue la misma naturaleza
que te dio la vida
la que también te la arrebato.
Botón que nunca serás rosa
tu sueño quedo en ilusión...