Símbolo de la pasión que alto marca
por una cruz en la mano, toda acero,
arde carne viva, envolviendo el deseo,
es fe y entrega tuya brillando el alma.
Devota tu tarea, floreciendo la calma,
diosa que es amor contra lo incierto,
amor que cura del dolor solo lo yerto
dejando el resto valga hoy y mañana.
Renace la flor que no tenía mas ganas,
sobre tu paso, crece otra vez el tiempo,
la luna, es sol toda la noche despierto,
de la naturaleza, ese verde es tu gama.
Las heridas del pasado fácil las sanas
con tus manos, profetas de mi cuerpo;
con tu vista prendes a mi alma el cielo,
mar de estrellas do cada noche bailas.
Cada vez que su calor mi vida alcanza,
en tu simpleza de ser aventura venero;
amas mi vida, su ciencia, lo que siento,
coronando este sosiego sólo tu palma.