Inventaré millones de maneras
para decirte que te amo.
Mil palabras, mil escusas,
para mostrarte lo que siento.
Necesitaré mis ojos,
mis labios, mis pensamientos.
Y unas caricias templadas,
que recorrerán tu cuerpo.
No me pararé ante nada,
me convertiré en deseo.
El fuego será el camino,
hasta el portal de tu lecho.
Me fundiré a tus caderas,
hasta formar uno solo.
Y entonces sabrás mi vida,
lo mucho que yo te he amado.