Hugo Emilio Ocanto

Tan solo unas palabras

Unas palabras  quisiera

tuvieses en cuenta.

¿A quién se las digo?

a quien quiera grabárselas

en su corazón...

no quiero causarte tristezas...

todo lo contrario...

quiero que seas feliz...

porque a pesar de mi dolencia...

yo lo soy...

Hoy se me ha ocurrido decir esto,

y aquí lo estoy expresando...

Todos tenemos un determinado

tiempo de vida...ojalá para tu final,

te falten muchísimos años...

y para el mío... para mi final,

ocurra lo mismo...

que pasen muchos más...

aunque ya seré muy, muy mayor...

con mis setenta y dos abriles

a cuestas me siento bien interiormente,

aunque a esta edad siempre suele

sentirse algún dolorcito corporal,

aquí, allá... es muy normal eso ocurra...

a veces hasta a la gente joven

les sucede...

nadie tiene la salud

ni la vida comprada...

La vida pasa...

o diría se nos pasa...

los años suceden uno tras otro

aceleradamente, sin darnos cuenta...

y vivir la vida con sentimientos

y amor, es maravillosa...

Aunque siempre por allí escondida

existe para todo humano

una pena, un desaliento, un fracaso,

una ausencia, un desamor...

Así es la vida...

Vinimos a este mundo

por dos seres que se amaron...

nos encargaron... y vimos la luz

del mundo al nacer...

El mundo que Dios creó...

¡Cuánta necesidad tenía

de decirte lo que estoy expresando!

y aquí leyéndolas estás...

y tal vez las escuches...

¿Por qué siempre tengo

la necesidad de comunicarte lo

que siento...? A ti, que me lees,

que me escuchas...

Es una inmensa alegría que siento...

el saber que estoy junto

a ti, que me lees y escuchas...

te estoy dejando mi herencia...

palabras que brotan de mi alma...

quiero que me recuerdes...

quiero que no me olvides,

que me tengas presente,

porque junto a ti,

que me lees y escuchas,

soy inmensamente feliz...

Si este fuese el último

expresar, y tú estás conmigo,

ten la seguridad de que soy

realmente feliz...

Tanto a veces tenemos que padecer

por culpa de cierta gente ignorante,

déspota y ambiciosa...

ten en cuenta que me refiero

a los genios que nos gobiernan...

pero yo me conformo con los que

están aquí conmigo...

e insisto... ¿por qué la necesidad

de tener que decirte esto

que tú lees... y tal vez escuches...?

Guárdame en tu corazón,

como yo te tengo en el mío...

si llegases a estar ausente...

te extrañaré...

si yo llegase a estar ausente,

si dejase de vivir...

sigue teniéndome en tu corazón...

nadie ha de quitarme la felicidad

que he tenido de estar junto a ti...

porque al estar conmigo...

un poco me has amado...

y yo al leerte o escuchado a ti,

te he amado.

Es el amor del ser humano

hacia otro ser...

juntos, siempre juntos...

aún después de pertenecer

al mundo de los vivos...

Todos los derechos reservados del autor(Hugo Emilio Ocanto - 17/12/2012)