Y, si fuera tu mirada…
…con su encanto de brisa peregrina,
como estrellas que me cubren con su manto,
que me pierde y ciegan por su encanto,
Más no, no es sólo tu mirada,
Son mis ojos, que te hacen divina.
Y, si fuera tu sonrisa…
…Mi apetite de cantos halagüeños
El misterio de aquel libro aún no escrito
Que traduce el silencio de mis gritos…
No, no es tu sonrisa.
Es la locura de mis anhelos y mis sueños
Si fueran tus pechos lisonjeros?
Los volcanes que explotan su alegría,
Y que se imponen aferrándose a su imperio,
El de luz, de sombras y misterios,
No, no es el magma que induce a la herejía,
Son mis manos, que me han vuelto prisionero.
Si fuera tu vientre, acabaría la belleza,
La pureza moriría lentamente.
Lo dulce tomaría un tono amargo.
El mar se perdería en el letargo
De olas que aclaman la torpeza,
Crucificando al gorrión por la serpiente.
Y, tu voz? La esquiva dimensión de la poesía
De los cantos no escritos por Neruda,
O el ruido del silencio susurrante
Como céfiro de deseo embriagante
que recita satisfecha por mis dudas
No, tu voz no canta esta elegía.
Mi locura y mi tormento se resisten,
No te puedo borrar de mi memoria
Y aún no puedo terminar con esta historia
No, no tu mirada, tu vientre o tu sonrisa
Ni el encanto de tu voz que no hipnotiza,
Sólo el sabor de los besos que me diste
Si, son tus labios, mi tristeza y regocijo,
Moraleja de una fábula macabra,
El fuego que apaga mi cordura,
El infierno del cielo en el que vivo,
Que alimentan de silencio mis palabras
Y el placer de esta calida tortura
Son tus labios, las cadenas que conceden libertad,
El pecado que fecunda en la pureza
Del amor por el odio concebido
De mentiras que florecen en verdad
De la duda descubierta en certeza
En lo perfecto, en lo bueno, en lo prohibido.
Los que otorgan santa paz a esta guerra,
La de mi alma, que sufre y que se aferra,
A ese espíritu que roba mi paciencia,
Inocente del fervor de mi demencia.
Esos labios, los que paren a los besos
Esos, labios que de ti me tienen preso.
Son tus labios, son tus besos, son mis sueños…
Es un canto, que elogia lo hermoso de vivir en la muerte.
Es un canto al cielo de mi infierno,
al placer del dolor de mis tormentos.
Un canto que llora en la alegría y que ríe en la tristeza
Es un canto a lo más hermoso de tu belleza,
Es un canto no inventado.
Es un canto no contado
Es un canto o tal vez… sea una elegía.