Yo sé que tú me amas
y que te amo igual,
pero yo soy la hoguera que ha apagado sus llamas
y tú la lluvia tenue que irrumpe el vendaval.
Yo sé que hay en tus ojos
ilusiones primeras,
pero en los míos se esconden mil penas como abrojos
al igual que los vientos azotan las praderas.
Y al mirar esta calle
tan vacía y sin gente,
me parece mirarme tan pueril sin detalle
que el amor que me ofreces me sienta indiferente.
Tu eres la rosa en mi jardín sin vida
el aroma inefable que cubre mi sendero;
el bálsamo tú eres que curase mi herida
ahora que estoy triste te alejas por entero.
¿Cuánto amor me has brindado?
Que mi copa esta entera
…¿cuánto amor tú me has dado?
Y no estás a mi vera.
No te culpo ni riño
es sólo un desahogo,
porque sé que tus brazos aún palpan mi cariño
y que son figuraciones, que embelesan y ahogo.
Porque sé que me amas
con ese amor tan tuyo,
me recuerdas las ramas
de rosas en capullo.
Por ello no hagas caso a este viejo quejoso
que ve su camino ya en ruinas…,
y no aprecia el amor tan airoso
ofrecido por ti sin espinas.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Sergio Jacobo “elpoetairreverente”