Dices que ya no veras el sol…
Creo que lo tienes en tu mano…
Pienso que la espera no es en vano
Y por ello aguardas su llegada
El tiempo no importa
No hay tiempo perdido
La vida no esta delimitada…
Por relojes fijos en paredes blancas,
La vida persiste en tu mirada
Tu mirada eterna, los ojos azules
Delatan al sol en madrugada…
Delatan el cielo, esos ojos tuyos
Y en ellos, tu alma iluminada.