EMILIA LEE / La mujer de abril

Giralunas

Descorro el velo nocturno

saboreando el amanecer

en cada rayo que pare

la visión de un nuevo día

 

 

Uno a uno los trinos

van fraguando una canción

enlazando ramas en nidos

cobijan semillas que sueñan

alas en libertad volando

 

Aleteos de seda

abanican el silencio

mariposas multicoloras tapizan

un cielo límpido y juvenil

 

El rocío impregna el aire

y un remolino remolón

que otea las madrugadas,

enamora con su encanto

a virginales giralunas

tornando en azul el viento

mientras gravitan la luz

de la matutina blanca Luna.