No te muero
te resucito y me desvelo
no te pierdo
me encorvo y camino
y ayer...
cuando la tempestad fue cruda
cuando te recitaba lo de Neruda
en un desespero de canción
apelmazado a tu oración:
" Ven a mi y no te mates, corazón"
Y ayer...
Cuando el cielo era de ladrillo
cuando era rojo el bombillo
del atardecer de los enamorados
le dices tu a este tarado:
"Ven a mi y no te mates, corazón"
cuando ya el corazón
lo tengo congelado.
Blas Roa