Yasdory Pernalete Oropeza

EL SEMBRADOR

Yo vengo del campo adentro

con valor y gallardía, porque

ser un campesino me llena de conmoción 

y me da satisfacción, formar parte del paisaje

 de aquellas zonas rurales

donde crecen los maizales que forman

los comensales de la gente ciudades.

 

II 

La tierra que yo cultivo

me da una gran emoción,

cuando me entrega sus

frutos me alegro y con razón,

porque siento ya cumplida

mi magnífica labor

III

¡Así le pasa al maestro!

como Jesús enseñó,

 cuando cumple su trabajo

 y lo hace de corazón al graduar

 a sus alumnos ve cumplida su misión.

IV

De todo las profesiones

me gusta la de educar,

porque se siembran semillas

 para poder germinar

unas nacen de una vez,

a otras les cuesta más,

 pero el que es buen sembrador;

esto lo hace crecer

 lo invita hacerse

muy fuerte y a vencer contrariedad,

y en la próxima cosecha,

 él no la va ni a notar,

 porque las que no nacieron

 ¡hoy se le multiplicaran!.

 

V

Cuando yo miro mi escuela

me da una gran emoción

al ver que en ella estoy,

y recibo esta instrucción

siento una inmensa ilusión,

¡ Y le pido yo al señor

 que a mis maestros queridos

les colme de bendiciones!

para que sigan creciendo

con ímpetu formador,

                                          Y alienten ese  espíritu creador,

¡Que son los que se aventuran

como este gran sembrador!