Esto es lo que me pasa por la testera.
La vida de pobre es una porquería,
lo sé desde la guardería.
Siento decirlo sin temblaera.
Si me tocase la lotería
menuda vida me correría,
gastaría sin delicadeza,
mi profesión, la gandulería,
mi afición, la cetrería,
viviría como el rey, su alteza.
Pero sé que eso no pasaría
porque, encima, peco de roñería.
No exagero mi franqueza.
Sólo, si fuese el gordo, lo compraría,
siempre pienso esa tontería
Si no compro y toca, una quimera
y mi cabeza en extrañarse, la primera.
Los domingos, café y anís, con la suegra.
Otro sábado más sin viagra.
Viernes, petanca.
Este es mi fin de semana.
Cualquier día me tiro por la ventana.