Ecos del viento
Al sol le gusta darle luz y calor
A las rosas,
Y a las violetas le gusta
El roce del viento,
Tanto como a ti te gustaron mis letras,
Que acogieron tu llanto en mi pecho
Aquellos días de enero.
Nuestro amor el viento lo llevo,
Nada es eterno,
Te perseguí cuando huías en el horizonte
Y solo me encontré,
Montaña tras montaña.
El viento trajo los ecos,
Unos gritos desesperados:
“no te vayas aun te quiero”.
Abel de Miranda.