Antonia Ceada Acevedo

Entre pastores y ovejas

 

 

Mientras los pastores beben,comen,rien,beben,comen,rien…

¿Cuántas ovejas descarriadas en este monte de manzana primera?

Si  llueve gotea,si hace calor tenemos frio  y el viento nos esconde;

Al contrario que  ese Cristo que  puso la otra mejilla por querer volar,

Un Cristo al que los pastores le celebran su cumpleaños ignorando su nacer.

Mientras los hombres no incluyen la tierra entre  sus familiares,

El líder crece con el consumismo que promulga derrotar,

El pastor,camina lento hacia el cobijo de su madre en flor

Y  El Cristo obligado a nacer sin resucitar siquiera.

-¿Hablar  ya de qué?

Mejor hablar de quien…

Ovejas  María Magdalenas  soy, son, somos…todos juntos…

Y, Oveja, soy, Hombre, ciudadano de oficinas mediocres

Porque donde el diablo bebe, Algún Dios se lava las manos

Como de  aquel Poncio maestro todos los pobres aprendieron a ser  patrón.

Ya no hay Cristo que quieran saber si será o no será…

Ay,ay cuantos devotos  de plegarias malgastadas.

 

Antonia Ceada Acevedo