chrix

Decir adiós.

Si la palabra se estalla en pecho braceando el aire,
mi susurro se cimbra en una deleble nube.
Si giran en el tango de los cigarrillos remontando humo,
lloran el bandoneón y el violín de la lluvia.
Si se pierden en el olor a café de algún bar,
de paredes llenas de recuerdos, ahí estará el tuyo.
Quedan atadas a los cordones de mis zapatillas
quedan recorriendo carreras de gotas sobre mi piel.
Si alguna vez mi voz irrumpe con timidez
de las pistas mordidas de tu almohada, no recuerdes
la palabra adiós, recuerda las constelaciones de las
estrellas al nombrarlas al oído para ti.
Si en algún momento se te extravía la razón
y decides recordar algo mío, solo arrulla a tus
tímpanos con el latir de mi corazón
cada vez que a mi te acercabas para darme un beso
y también recuerda el silencio de mis ojos al verte partir.
Y desde luego recuerda... que no le basta a un final con
escribir solo Fin!