En las vueltas revueltas
En frente de tu frente,
Retrasa a quien te traza
Lo duro que te ha durado.
Amor mío ¿Quién, por íntimo, te ha intimidado?
Para, después, partir, partiendo un río, por dos, enhebrado.
¿Quién aprende tu aprehensión de horas fugitivas?
Porque el corazón atravesando travieso
tu campo de esquirlas en el tiempo, vino.
Y mordiendo mordeduras de ojos por trozos, sabe de tu raudal de barro.
Mañana dilatarás la ya dilatada espuma,
como un puma que al mar marea
Y vendrás aprisionando la prisión de la detenida detención.