Francisco Gaitan Downs

…”CONDENADO”…



Estaba en Managua 
Solito en casa de un amigo
De vecino tenía un Iglesia 
Y sus cantos me llamaban.

Quise llegar hasta el altar 
Y no me dio valor
Más que sacar una silla 
Y escuchar de largo.

Sentí necesidad 
Del amor del señor
Quise tener la compañía 
De cristianos humanistas.

Y cuando decidí caminar
Todos salieron del templo
Y frente de mi venían tres señoras
Y al pasar a mi lado.

Hicieron un gesto tan despectivo
Que ni si quiera fui merecedor 
De ver sus ojos y con agilidad 
Aumentaron el ritmo a su caminar.

Me sentí tan triste 
En saber que hay cristianos 
Que estigmatizan y discriminan 
Sobre todo asesinan con su actitud.

Sin dudar le di gracias al señor
Por no haberme dejado llegar
No a su iglesia si no a un niño
De oropéndolas.

Ya que gritan y cantan
Sienten la presencia de nada
Salen transformadas y purificadas
Y desprecian a los mundanos.

Tengo meses de no asistir al templo
Pero al menos es jovial compartir conmigo
Sin duda alguna te sonrió y si me dejas
Te tomo entre mis brazos.

Pero aprendí que no es congruente 
Lo que aprendes y haces 
Así que mejor me quedo aquí
Escribiendo las cosas de mi corazón.

Escrito: Francisco Gaitan Downs.