Mi pequeña Elizabeth,
carne de mi carne
carne de mis huesos.
Lucha que empiezas
apenas.
¿Tendrás con el tiempo.
- que todo lo trasmuta-
cebolla que comer,
acaso pan y miel?
Mi pequeñita:
construiré tu heredad
día a día.
Te enseñaré
que todos somos iguales.
Que la justicia
se construye
(tal como los sueños)
Tendrás que superarme,
hálito a mis huesos.
Lucha que empiezas
apenas.