Tras tantas lagrimas mi ilusión cayo,
y aún asi recuerdo tu sonrisa de fuego
de incandecente fulgor, tu pura presencia
que incinero mi corazon.
Ceniza a ceniza me devoraste y con cada chispa acabaste
con las que pudieron avivar de nuevo nuestra llama
tu fuiste mi combustible hasta que la llama extinguiste,
tu eres mi amor, el calor de mi alma.
Y el unico placer que me quedo de amarte, es, QUE AUN TE AMO.