Tus ojos son un diamante,
una estela encendida de una aurora brillante
Quisiera solo,
verme un instante,
navegar,
como prohibido navegante.
Esa sonrisa derrite glaciares,
y el eco eterno de las ciudades
Un libro lleno de mil verdades,
que abraza
y que me dice unamos nuestras amistades
Tu voz hace callar los mares,
y hay un cierto aroma de cielo en tus calles
Paso tu luz como un cometa,
como estrella fugaz entre nubes quietas
Tu barca vi pasar por aquí,
tuve el aroma de tu cuerpo pero lo perdí...