Alma Erótica José Luis Agurto Zepeda.

TUS PALABRAS

Como savia que corre por las venas de las plantas,

como fuego que se enciende y no se apaga,

como volcán que con incontenible furia estalla,

así quedaron clavadas en mi cuerpo tus palabras.

 

¡Cómo dañan tus palabras!

 

¡Cómo amarga tu partida!

Cómo vuelven a encenderse los recuerdos

Cómo vuelvo a amarte, como un idiota vuelvo...

a pensar en tus palabras, clavadas en mi cuerpo.