Es un día nublado
frio, solitario,
un café en la mesa
y también mi diario.
Pienso...
un suspiro
escapa de mis labios
tal vez es que te extraño,
extraño tus caricias,
extraño tu mirada,
extraño tus sonrisas,
extraño tus palabras.
Tal vez, quizás mañana
regreses a mi lado,
y mientras tanto yo
te seguiré extrañando
con esta furia infinita
de no tener tu alma
de no tener tus brazos
de no tenerte todo
de no saber que hago
que hago sin tus besos,
que hago sin tu guía
que hago sin tu cuerpo,
que hago si yo quiero
que tú me ames tanto
tal vez, como yo te amo.