Pensando en tus ojos de cielo,
me ha encontrado la mañana.
Pensando en tus dos cielos
y mirando por la ventana.
Me ataco el insomnio
en aquella penumbra, pues
ha despertado a mi corazón
tu melodía sin música.
Descubrí que de tus labios,
finos, suaves, dibujados.
Saldrían esas palabras
que me han hechizado.
Pues por esas razones:
insomnio, tus palabras,
La mañana me encontró
pensando...
en el cielo de tu mirada