Vislumbro ilusionistas pintando el bulevar
reticentes, comen de la escudilla ajena
con su insidiosa mueca lejana a la pena
deslíen la certidumbre asi callan el mar.
Vislumbro halcones cercenando mis dos alas
vieja y audaz ave rapaz sobre este cielo
la sed y el celo lo dirigen en su vuelo
cubierto tras un velo de nubes compradas.