Que despierto te sueño,
Que te veo y no lo creo,
Que te toco y voy al cielo.
Que un día sin miedo,
me atreví a entrar al reino.
Que ya nada fue igual,
Que los colores cambiaron el tono.
Que de los sepias pasaron al oro.
Que eres un tesoro,
que Dios me concedió,
sin saber por qué...