Idelfonso Buitrago Arango

POSTUMO

sin mas ostentanción, a Doña Ana

 

Mañana,

cuando tus días hayan adquirido

la edad de la ceniza

y te haya llegado la hora del luto

y del frío irresistible,

- más allá del silencio,  de las lágrimas

y los rezos consabidos -,

cerca tu lóbrego inventario,

yo estaré como él último vestigio

de tu fallida espera

en el postigo oscuro del insomnio,

o como una señal inocultable

de una de las tantas guerras que perdiste!!!!