No sé por qué extraña razón
Te siento hoy menos ausente
En la blanca oscuridad del papel
Ha quedado una veta de ti
Como la sangre en la nieve
Pero tal vez me equivoque
Tal vez solo sea mi propia sangre
O la lunar desesperación
De mis deseos a esta hora
Pues si miro desde otro ángulo
Si sigo escribiendo palabras
Que rimen con tu imagen
Me encontraré de nuevo contigo
Hablando frente al espejo
Y seguirás estando tan ausente
Como la última vez que te quise.