Suenan cascos repetidos
produciendo ecos
que sólo el camino entiende
la vieja senda que la vió pasar
incontables veces
libera el polvo de duros años
con afán busca a su jinete
entre sombras y luces de mil días
y vislumbra su silueta
a lo lejos….
en la espesura de una vida
apenas conocida.
No entiende su intención
se detiene en seco
respetando un espacio prudencial
espera impaciente…..
aguarda una señal
patea dos o tres veces el suelo
con energía
deja escapar un resoplido agitado
y se entornan
sus profundos ojos cansados
replicando en su prisma
esa imagen que atesora.
Se tensan sus músculos
las venas de su cuello hermoso se estremecen
un ligero temblor la sacude
pero nada provoca reacción de su jinete
alza sus patas delanteras al aire
clamando una respuesta
y vuelve a caer
agobiada por su propio peso
asentándose bien sobre sus cuatro patas
los pilares que el Creador le dió como sostén
y justo en ese instante doloroso…
asoma la razón
reclamando instinto de conservación
gira un par de veces
retrocede
confusa…. dolida
y se aleja……en otra dirección
sin jinete… libre
abrazando el viento
buscando el sol.