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Alineando voluntades es todo más simple
y no hay porqué revelarse,
espera la situación y alármate si es tarde.
Estrechando posibilidades la duda merma,
no tienes nada que perder y estás harta de ser tan tierna...
Nunca te sirvió de nada, probaste cualquier manera.
Indagaste en lo más recóndito de tu alma,
en lo que ni siquiera pensaste que existiera.
Te conociste por dentro, te adivinaste por fuera,
dejaste ver de ti lo que los demás quisieran.
Beneficios al instante, malos tragos con el tiempo,
comprendiste quizá tarde que no es producente el intento.
Cerraste tu puerta y te volviste blindada,
aseguraste a los tuyos que ya no te podía herir nada.
Pasaron meses y meses, te sentías realizada,
hasta que se produjo aquel cambio que juraste no esperabas...
Creíste poder con todo, de madura te las dabas,
sin embargo en tus entrañas notabas que algo cambiaba...
Comenzabas a experimentar esperanzas demoledoras,
te prohibías todo aquello que pasara de unas horas.
Llegaste a una conclusión, ya que de todo se aprende,
eso decías ayer y hoy de nuevo te sorprendes...