Yo quisiera
esta tarde ardiente,
descalzos mi pies,
y mi alma, silente
liviana, desnuda
La mirada quieta
El paso sereno,
andar por la arena
sin miedo,
sin pena, quisiera.
Caminar despacio,
hasta que oscurezca
llevándose el sol,
su última huella.
Y sea mi aliento,
soplo del viento.
Mis brazos al cielo,
escribir con las nubes,
mis versos quisiera.
¡Ay, si pudiera!
Treparme al lucero
allí, gritar que te quiero,
sólo eso, tan solo
yo quisiera.
Elida Isabel Gimenez Toscanini