Mi amor, recuerdo que en tu luz de enero
Nuestras manos se unieron en un tacto.
De dos fuegos nació la llama y el pacto
Que enlazo nuestro amor vivo y sincero.
Fueron juntas cogiendo tiempo y esmero
Por nuestros pasos más allá del acto;
Aprendiendo el lenguaje del contacto
Guardaron la dulzura en donde muero.
Y cogimos la flor de nuestro instante,
Cual maravilla ardiente nuestras manos,
Para unidos en pétalos llameantes
Jurar que nuestro amor no será en vano:
Amarnos entre el filo y lo cortante
Desde el anochecer a lo temprano.