Murialdo Chicaiza

Confesión última

Mientras el mundo se deshace

tú y yo, sobrevivientes del odio,

nos refugiamos en los abrazos.

 

Mientras que los osos polares

no saben donde llevar su blancura de nieve,

tú y yo nos escondemos en los besos.

 

Mientras las raíces son desgarradas

y lo verde nunca más será,

tú y yo conspiramos

en el eterno vestigio del amor.