Mano dura.
Una tristeza
me llena,
dame luz,Señor,
para discernir,
aunque mucho amor
pueda dar a mis raíces,
mano dura y sequía
a las torceduras daré.
tú, Padre Celestial,
sabes de mi amor inmenso,
pero es mejor usar la vara
y rescatar las raíces,
que aceptar su dejadez
y verlas secar.