Vi a la Muerte muy triste
cosa no común en ella.
Con sigilo, temblando,
me acerqué.
(Pudo más
Curiosidad que Cordura).
"¿Qué le aflije-pregunté-
a la más poderosa señora?"
(Mi voz se perdió
por los huecos de sus ojos).
"Todos me rehuyen-contestó-
todos me odian,
¿acaso puede la Vida
tan bien amada
nacer sin mi presencia?"