EDUARDO FAUCHEUX

CAPITULO 6: QUE EL COSMOS FUNCIONA CON AMOR

 

CAPITULO 6: ¿QUE EL COSMOS FUNCIONA CON AMOR?

 

Seguir hablando de Felicidad, para mí, es un placer que puede llegar al cansancio y al aburrimiento a algunos; pero es mas fuerte que yo, ¡qué quieren que le haga!
Acuérdense que no todo lo que brilla es oro... No crean que soy el tipo más feliz del mundo. Yo soy uno de esos minúsculos puntos en el Cosmos, con sus ilusiones, frustraciones, cuentas pendientes, con sus remordimientos y penas. De ahí que considero que la Felicidad funciona con las Matemáticas que rigen al Universo, porque es el resultado de las sumatorias de la sucesión de acontecimientos ocurridos segundo a segundo a lo largo de cada una de nuestras vidas.
Sería una utopía suponer que cada uno de esos segundos fueran cien por ciento felices. Siempre habrá dolor, traspiés, pobreza, depresión, injusticia, violencia, etc...que harán que nos sintamos agobiados en ciertos momentos. Lo que deberíamos intentar lograr es minimizar esos momentos, aprendiendo a aceptarlos como parte de la Vida misma.


Fíjense los términos que estoy usando: minimizar, porcentajes, sumatorias, sucesión, segundos (implica Tiempo, por lo tanto, medición)... ¡Todo relacionado con las Matemáticas! Y todo, por ende, está relacionado entre sí...Nada es independiente de un Todo! Ni siquiera el pensamiento, regido por la Química, la Física y lo que fuera... al igual que el espíritu, la felicidad, el tiempo, el espacio, los increíbles espacios infinitos dentro de un átomo y fuera de él, en el Cosmos Sideral...
Y TODO LO QUE NOS FALTA DESCUBRIR!!!

Entonces... ¿cómo funciona todo este intríngulis?

Estamos rodeados de teorías, de diferentes religiones que interpretan supuestas enseñanzas antiguas, de suposiciones y supersticiones, de adivinos, filósofos, metafísicos, charlatanes, estafadores al alma, y, así, entre tradiciones y nuevas corrientes, este circo de la Humanidad desenvuelve sus espectáculos entre un público crédulo y manso al que llevan de las narices sometiéndolo a credos y limosnas para alimentar a imperios revestidos en inmensas riquezas  y entre desconfiados, agnósticos, ateos y profesionales del embaucamiento religioso.

Pero hay un común denominador en los espíritus curiosos, ávidos de conocimiento:

¿Cómo funciona todo este asunto de la Creación?

 

Todos hablan del Amor.

Pocos saben lo que es...

Es como explicar sobre un color

al que no lo entiendes, si no ves.

Son abstractos los valores,

como el espíritu y el Tiempo...

¿cómo puedo explicar colores

sin que me sea un contratiempo?

 

Este denominador común al que se llama Dios, Amor y mil nombres más, al que todas las religiones profesan y le expresan su admiración, temor, oraciones, agradecimientos, ofrendas y súplicas, debe tener algo que ver en este asunto del Universo, ¿no?
Abandonemos por un instante lo metafísico, lo esotérico y lo místico... Concentrémonos en lo sensorial, en lo emocional, en lo físico, en lo tangible; en lo que estamos acostumbrados a percibir desde nuestro organismo y mente.

 

¿Cómo podría explicar lo que siento cuando me enamoro?

¿Cómo puedo transmitir mi pena o alegría, cuando lloro?

Y cuando hago mi buena acción del día,

¿puedo compartir sensorialmente mi alegría?

¿Cómo puedo inyectar en ti mi dolor

para que entiendas cuando estoy peor?

Como el cansancio al que mi extenuado cuerpo agobia,

podrías entender el temor de todas mis fobias?

 

Algo hay, evidentemente,

dentro de nuestras percepciones,

más allá de la química, más allá de la mente,

que produce que a todas nuestras emociones

les apliquemos a todas un criterio humano,

inexplicables, con lenguaje lejano,

como se da, por ejemplo, la imposibilidad

de explicarte qué siento con la felicidad.

 

Entonces, qué me hace escribir estas letras? ¿Porqué me tomo el trabajo de compartir mis sensaciones? Pues... porque siento esa necesidad inexplicable de hacerlo... Porque percibo que ese famoso \"AMOR\", es regido por leyes universales y que, a la vez, es el que las dictamina. No es una teoría ni una especulación; es tan solo una percepción. Y como tal, solo puedo INTENTAR explicarla, sin tratar de convencer a nadie; solamente, compartir.

Cada día nuestro organismo nos da las pistas de cómo funciona nuestro entorno. Tanto nuestras sensaciones, emociones, dolores y nuestros pequeños y grandes caos o éxitos, nos podrían hacer reflexionar, si les prestáramos atención, acerca de nuestro tránsito por nuestras existencias.

Cada microsegundo es un milagro en sí mismo. En cada instante o hecho que pasa o acontece se desenvuelven universos, historias, protagonistas, conecciones... y cada evento nos envía una señal cósmica que, lamentablemente, perdemos por no saberla interpretar. Quizás ahí estén los secretos de los meditadores y contempladores que tienen la Sabiduría para entender esos milagros.

¡Hasta la Ciencia descubre y trata de explicar los milagros! Ya se está hablando de \"energías oscuras\" y \"física cuántica\", con la probabilidad de universos infinitos e impredecibles y cuestiones ligadas a eventos fantásticos que se parecen más a cuentos de ciencia-ficción.

Pero retomemos nuestra visión interior, que es donde, repito, percibo que está la respuesta a nuestros interrogantes:

¿Qué otra cosa puede explicar la tristeza por la pérdida de un ser amado?

¿Cómo se entiende a los sentimientos como la piedad, el asombro, el miedo, la angustia, el buen humor, la alegría y, en fin, toda la gama de sensaciones con las que convivimos en cada momento de nuestras vidas?
Solamente tratar de explicar de dónde procede el \"combustible\" que hace funcionar la creatividad y la inspiración, se hace tan complicado, que uno recurre al facilismo de las reacciones químicas y los impulsos eléctricos entre nuestras neuronas y conexiones dendríticas. ¿No habrá algo intermedio que se inocule en ese camino, que marque la diferencia entre tener miedo o disfrutar en un deporte de alto riesgo? ¿O sentir compasión o tan solo curiosidad por un delfín o una orca prisioneros en un acuario? Mi percepción me hace comparar que este tipo de \"combustible\" es común a todo el Universo de la Creación y solo se me ocurre ponerle el mismo nombre que le ponen las religiones a lo que comanda sus creencias: el Amor

Defino al Amor como un tipo de energía de la Creación.

La Energía.

Con ella se crean nuevos mundos, se pinta un cuadro, se cuida un niño, se deshace un sol, se ayuda a cruzar la calle a un ciego, se enseña a nadar, se crea vida en la Tierra, se inspira a profetas, se le inyecta vocación a una enfermera... y así... cósmicamente hablando, esta Energía distribuye la creatividad y la inspiración según su conveniencia en un Plan que ¡vaya uno a saber cuál es!

La Ciencia habla ahora de la Energía Oscura como la responsable de la Expansión del Universo, que contradice a la Ley de Gravedad.

Un nuevo telescopio para \"espiar\" el espectro infrarrojo está planeado para el 2013. Éste estudiará esa energía que los cientos de religiones ya venían hablando de ella desde hace siglos. ¡Es muy conveniente para los místicos y esotéricos que se trate al Amor desde un punto de vista científico y astronómico! Y hasta es una buena solución para los ateos tener una explicación científica sobre Dios y el Amor, ya que al ser algo relacionado con la Ciencia no es necesario que sea motivo de culto...
 

EL TODO ES EN UNO
EL AHORA ESTA SIEMPRE
Y EL SIEMPRE ESTARA VIVO!


EL TODO, EL AHORA, EL SIEMPRE,

ES, ESTÁ Y ESTARÁ EN UNO SIEMPRE VIVO.

 

EL SIEMPRE ESTÁ .

EL TODO ESTARÁ SIEMPRE VIVO.

Y EL SIEMPRE ES EN UNO.

 

 Y dejo esto último, para que mediten...

pues creo que en nuestros corazones,

la mayor felicidad que necesiten,

entre todas las aflicciones...

entre tantas injusticias...

y entre todas las pasiones,

el Amor es como una caricia

que sosiega las sinrazones

y que en medio de la nada

y entre todo lo que queremos,

en nuestras Almas angustiadas,

todos... ¡ALGO BUENO TENEMOS!

 

Qué maravillosa que es la Vida cuando puedes visualizar esto!!!

 

Eduardo Faucheux

11-01-2013