Hoy amaneció y de nueva cuenta no estuviste,
quedo tu recuerdo en mi pensamiento.
Me mire sufriendo la angustia de tu ausencia,
anhelo aquellos tiempos cuando me quisiste
mas los días ya se han vuelto un tormento.
Surgió entonces un suspiro con sabor a carencia,
es amargo terminar la jornada sin la alegría de mirarte.
Frente a nuestro mundo me siento con prudencia
para contemplar mis memorias con paciencia
testigo soy de cuanto mas de mi te alejas, acentuando mi sufrimiento
me pregunta el corazón ¿Hasta cuando eh de extrañarte?
Por respuesta le sollozo una sonrisa que dice...
¿Por que preguntas lo que respuesta no tiene?