No hablemos más de amor, por favor te pido,
pues solo busco de ti tu amable amistad,
olvidemos todo, todo lo vivido,
porque entre tú y yo, no habrá felicidad.
Deja ya mi corazón que está dormido,
no pronuncies AMOR con esos labios,
deja que descanse, él ya ha sufrido,
mañana despertará con nuevos bríos.
Todos los días estaré esperando,
que llegue a mí ese olvido,
aunque tú vivas de mí recordando,
solo diré: sigue aún bella, no fui el elegido.
Hay algo de mí muy dentro que me obliga,
a humedecer mi rostro con mi llanto,
sufro tanto y nadie me abriga,
tengo miedo al dolor más no al quebranto.
Por eso por favor dejemos todo en calma,
que nadie nos critique de la ilusión aquella,
ayúdame esta noche a sepultar mi alma,
y acabemos toda aquella historia bella.
Tú serás desde hoy mi único testigo,
de mi penoso amor y suerte impía,
ya no hablemos de amor aunque este contigo,
solo dale alivio a la desgracia mía.