Anoche besé tu cara
Y entornando tus lindos ojos
Dijiste que me querías
¡Qué palabra más bella
De los labios te ha salido!
Entre la luna y la noche…
Entre misterio y misterio
Guardamos en cofre de oro
Nuestros furtivos encuentros
Para contarlos sonriendo
Mañana, a los hijos nuestros.
Mujer… mira que ya me veo
Haciendo a mi niña los rizos
Entre oro y chocolate su pelo
De la niña que por más querida…
Por más que rebose mi corazón de alegría
Jamás será más amada ¿sabes?…
De cuanto te estoy amando.
Me lleno de orgullo cuando te miro
Y del cerezo cae el embeleso
Cuando su fruto maduro
Se posa en los míos en un dulce beso.
Si te casaras conmigo…
cuatro vástagos tendríamos
Quiero que dos sean niñas
Para mirar tu ternura en sus ojos
Para poder amarte, cuando aun no te conocía
Y los varones para que
Con los rulos sobre los hombros
mires cuan largos yo los tenía…
¡ay!... y no quiero morir de contento ese día
Quiero vivir para amarte
Y darte todo cuanto tú te mereces.
Perdona si no nací antes
O si ni por casualidad, haya sido tu vecino
¡Te juro que ya a los quince
Te hubieras casado conmigo!
Y la gloria hubiese alcanzado
Con verte dormida en mis brazos
En un arrunchis de cuerpo y alma
De vino y rosas el lecho
Y un tinto por la mañana,
Recuperar la postura
Y regalarte una rosa temprana.
Delalma
28/12/2012 11:05 p.m.