Derramé en mi la melancolía
de una noche buscando tu voz,
sin encontrarte por ningún rincón de mis recuerdos,
recostado en la playa de un ayer
que hoy ya no esta.
Que te quiero es verdad,
es verdad que te busqué
pero nunca te encontré.
Y te quiero tal vez,
que te quise es verdad
pero nunca te amé.
Te busqué,
hasta donde no te encontré
y es ahí donde nunca, te amé.
Pudo haber sido,
ayer, quizá,
pero no te encontré.
Me encontraste esperando
cuando el reloj se descompuso
o tal vez lo olvidé
pero es tarde y te busqué.
Y es verdad, que te quiero
pero nunca te amé.
El Sax Del Duende.