Me levanto y pienso en mil cosas para escribir,
miro el amor de mi alma y me hace sonreír,
pienso si este día transcurrirá sin pena ni gloria,
o quizás si ocurran cosas para la historia.
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Gracias Dios por este día más de respirar,
por cosas agradables que mirar,
de lo necesario que hay que tener,
y de una vida más para disfrutar.
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Es una mañana calorosa,
con el “sol picante”… pero hermosa;
es muestra que en la tarde lloverá
y en mojarse ¿quien se atreverá?
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Luego visitaremos personas especiales,
para hablar de cosas importantes y triviales,
familiares que hacen parte de la alegría
de este maravilloso día.
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Llegamos a la visita, a la familia del amor de mi alma.
familiares queridos tíos sobrinos y el primo
y el estomago del hambre reprimo.
La olla grande puesta en la leña, como para cien personas
y hacer la visita más amena.
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Besos y abrazotes por doquier,
sale a flote el querer,
de hermanos que sin querer,
durante 36 años se habían dejado de ver.
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Historias que contar,
momentos a rememorar,
luego llega el mote del almuerzo
que lo disfrutamos sin ningún esfuerzo.
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los niños juguetean por toda la casa.
Era inevitable hablar de temas Bíblicos,
algo que evitan los políticos,
y que edifican nuestras almas.
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Que de edad Emilio tiene 72
cuando en realidad aparenta 52
que como persona es excelente
y que tiene el don de gentes.
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De la familia nos despedimos
de quienes nos muestran amor genuino
con sabor a divino
para siempre en amor y cariño fundirnos.
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